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Yo quiero destruir un reino
Envidio a la gente que vive sin sentimiento de culpa; yo, que pido perdón cuando se le cae algo al de al lado. En el ámbito laboral, a ese sentimiento se le llama ‘síndrome del impostor’, una sensación en la que creemos no merecer reconocimiento alguno porque, al contrario, somos un fraude que de alguna manera consiguió engañar a todo el mundo.
&;#8216;Amor, mujeres y flores&;#8217;
&;#8216;Rumores del Magdalena&;#8217;
La ruta de la ceda
Qué bruto, me van a decir, seda es con ese de sapo, el batracio símbolo nacional. Pienso en otra ruta, pues el espectáculo visto esta semana en el Congreso es triste, es muestra de a lo que se ha llegado en la política en este gobierno, con posiciones irreconciliables que se debaten entre la soberbia y los intereses personales y partidistas.
La nueva Academia
El efecto chino
EditorialesChina ha concitado esta semana la atención del mundo, y en particular de Colombia, por tres hechos relacionados con sus objetivos geopolíticos y económicos a corto plazo y que están enmarcados en la visión que tienen respecto a su relación con Estados Unidos, por lo que hay que analizarlos en ese contexto.
¿Quién habla?
Sorprende que, ante un evento de tal importancia para el desarrollo y la democracia del país, una consulta para conocer el punto de vista de los ciudadanos, el debate haya sido jurídico y no lingüístico, como si la autenticidad no estuviese en la construcción de las preguntas.
¿Qué quieres ser cuando grande?
Educación, la gran bandera
Los problemas de acceso a la educación superior en Colombia son enormes. Esa realidad afecta a miles de jóvenes, a los que se les cierra la puerta para adquirir los conocimientos necesarios y desenvolverse en el mercado laboral y así ayudar a construir país: la educación es un importante diferencial en la vida de una persona y de las sociedades.
Videos
Es un video fatal, pero, como ya ha sido probado hasta la náusea, mi indignación es lo de menos: el fiero ministro de Salud, dueño a esta hora, por el viaje del jefe del Estado, de la investidura presidencial, lanza a un auditorio indescifrable el grito "¡tenemos en cuidados intensivos a las EPS para que salga la reforma!", y ni el cinismo, ni la traición al